domingo, 22 de junio de 2008

En el infierno y en el cielo

Antes de nada, agradeceros vuestros comentarios y mails, y disculparme por tardar tanto en escribir. Estoy en el norte de Brasil, una zona espectacular pero muy pobre y falta de infraestructuras.
Llegar a Jericoacoara ya me pareció complicado: 2 horas de avión, 6 de bus y 1 de camioneta. Lo único bueno del viaje fue que conocí a un argentino que tenía una posada allí, me dejó quedarme medio gratis y me enseñó cómo moverme por la zona. Jeri es un pueblecito de pescadores al que acuden hippies y surfistas, un lugar con mucho encanto en el que la principal actividad es subir a la duna a ver la puesta del sol.

Desde Jeri el viaje fue bastante infernal. Fuera de la temporada turística sólo se puede ir de un pueblo a otro en "transporte colectivo": camionetas que paran en la plaza del pueblo, avisan para donde van, se llenan de arroz, patatas, etc. y encima se sienta la gente. Se viaja hacinados, con un calor mortal y dando unos botes que te destrozan todo el cuerpo porque los caminos no están asfaltados. Así hice de Jericoacora a Camocim, de Camocim a Parnaíba, de Parnaíba a Tutoia, de Tutoia a Rio Novo y de Rio Novo a Barreirinhas. En uno de los pueblo aproveché que tenía que esperar dos horas para ir al hospital. Nada grave, con una roca me hice una herida muy fea en el pie, no podía caminar. El hospital no era tan malo como esperaba; pocos medios y gente con pinta de estar muy enferma, pero me atendieron rápido (creo que me pasaron la primera porque lo mio sí tenía solución) y la cura fue muy profesional y efectiva.

En el último trayecto, cuando la camioneta estaba completamente llena, en plan tetris, aparecieron más personas y algunos se subieron al techo, uno aún intentaba sentarse con nosotros, así que yo me ofrecí voluntaria para subir y dejarle mi sitio, pensé "no puede ser peor que esto"... si nadie se ofrecía por algo era!! Aún me duelen los brazos de sujetarme para no salir volando, menos mal que sólo eran 3 horas.
Bueno, al final llegué a Lençois Maranhenses, un paraíso de dunas y lagunas, tan alucinante como se ve en la foto ;)

Sin duda, las recompensas han estado a la altura de los esfuerzos de viaje. Mañana marcho para Belem a remontar el Amazonas; creo que no estoy preparada, ayer había una ranita en mi cuarto y monté una escena hasta que me dieron otro...

5 comentarios:

Unknown dijo...

esta claro que más allá de las dunas siempre queda un final lleno de azul... es muy complicado seguir tus viajes, no hay tiroteos ni luchas entre bandas... está claro, brasil, no es lo que era...

tu paseo sudamericano empieza a tener pinta de locura, ulises intetaría quedar contigo, siempre que no fueses tan previsora...

pese a todo, veo que eres capaz de seguir respirando, lo cual ya es una buena noticia; no sé si sonará estúpido viniendo de alguien que está sentado en una cómoda silla a 5000km de distancia... pero... que no se te vuelva a pasar por la cabeza eso de: "no puede ser peor" todo es susceptible de empeorar...

p.d: aún no has "robado" nada?

Carlos dijo...

Carmen!! Siento incorporarme tarde con mis mensajes de apoyo y ánimo. Una cariñosa asignatura llamada medio ambiente tiene la culpa, seguro que me comprendes. Yo pensaba que el examen había sido duro, pero viendo tus andanzas ( aceptamos como andanza el cabalgar a lomos de una cafetera bamboleante), veo que debería sentirme afortunado! Si tienes pensado perderte para siempre entre la selva amazónica avisa pronto! Es posible que los de mckinsey me acepten como sustituto! Jeje.

Pues nada niña, me alegro que estes bien (bien vendada), que te vaya todo bonito y ten cuidado con las pirañas, que les encanta la carne de consultoras!

Un besote!

Unknown dijo...

Vaya canteo la foto de de la arena blanca k no se acaba nunca y el riachuelo mar ese.

Yo solo decir dos cosas, a k te refieres con "medio gratis" eh???, y ten un poco de cuidao pork lo del salvador de bahia no fue suerte, fue un milagro.

Weno me esta molando tu viaje, voy apuntando sitios k kiero ver y sitios k no.

Cuidate

Alex.

Anónimo dijo...

pese al riesgo de repetirme, insisto en que me mola leer tus textos más que a un tonto un lápiz. marco polo era un pringao comparado con tu cálido reflejo literario de las sórdidas aventuras que vives. me he meado con lo de la ranita. puntazo.
y la foto de la laguna entre las dunas es mejor que un cuadro de velázquez. (bueno, puede que no...jaja)
como buen bicho urbano que eres, no tenías ni idea de lo importante que es llevar buen calzado...no te hagas más heridas, te queremos sana y salva más que nada para seguir recibiendo fotos...
besos y abrazos!

Richard Yates dijo...

Jejeje, la cosa va mejorando. Menos mal que queda mucho mundo en vías de desarrollo... Mucho potencial para tus aventuras! ;)
Esta semana me he tomado vacaciones en el curro para estudiar (debería utilizar otra palabra en vez de vacaciones...), así que tenía menos tiempo libre para leer tu blog.

Ya se que no te morirás de envidia, pero el otro día fui a Basilea al partido Alemania-Portugal. Aunque me gustaría omitir esta parte (por que sin ella podrías llegar envidiarme un poco) no fui al estadio sino solo a la Fan-Meile que habían montado en el centro de la ciudad. Pero bueno, vi el bus y el hotel del equipo y todas esas cosas inanimadas que cobran derepente valor por que llevan una bandera alemana y doscientas personas a su alrededor.

Vuelvo a mis estudios; me apunto a la frase de alex: cuidate, que los milagros (a.k.a. la noche en salvador de bahia) son milagros por que solo ocurren una vez!
un beso!